MASINT y disciplinas

[juan de la cosa]

Nuestro relato comienza un 18 de Julio. Dicho día los peperos, azuzados por la COPE y apoyados por la Iglesia, dan un golpe de estado con ayuda de EEUU (parece mentira qué vengativos son los americanos, y todo por no humillarse ante la bandera...ZP. ¿qué hiciste?). Rodeada de una tropa de católicos Lefevrerianos y unidades de la Guardia Civil, Maria Teresa Fernández de la Vega manda un mensaje a su amiga Ségolène: mama pupa. Mientras tanto Rodriguez Zapatero es capturado y torturado horriblemente durante 55 días. La tortura es tan horrible que Juan de la cosa se estremece: le golpean con osos de peluche y le obligan a oir radio Vaticano todos los días. ZP está casi enloquecido pero resiste en nombre del progresismo. Mientras tanto, y de acuerdo con el carácter pendular de este extraño país que llamamos Estado Español (obsérvese la corrección politica del autor de este panfleto), una revolución está en marcha. Brigadas de católicos van por la calle arrancando piercings en vivo y rapando al cero a los que llevan tatuajes. Corporación dermoestética pasa a la clandestinidad (“la mujer en casa y con la cara lavada”) y se reconvierte a operaciones de reconstrucción de himen. El rosario es obligatorio y aquel que no reza es flagelado (“tontín, ¿cómo vas a entender a Jesús si no pasas por el proceso que él vivió?). La situación es terrible, ¿qué hacer?. Rápidamente, los new reds contraatacan con videos en youTube y mp3 denunciando al terrible situación de ZP y rogando la revolución, pero la situación es dificil en Francia gobierna Sarkozy y es favorable a los peperos. El saqueo del Estado Español comienza, pero hay esperanza: UME. Derrochando valor a manos llenas, atacan La Moncloa cuando Rajoy estaba tomando su purgante de las ocho y no estaba en condiciones de defenderse. Mientras los camiones-bomba tienen a raya a la guardia pretoriana de los fascistas, un grupo de valientes, equipados con spray antiviolador anulan la protección de Marianito y lo capturan. Mientras tanto aquí y alli los ciudadanos del Estado Español se rebelan ante la opresión y capturan a los lideres peperos. Acebes es sorprendido mientras era sometido a su lobotomia diaria (única forma de explicar el extraño mundo en el que vive). Zaplana es capturado en Valencia mientras paleaba el dinero de Terra Mitica. La alcaldesa de Valencia trata de huir, pero el peso de los joyones la retrasa fatalmente y será capturada. ¿Hay que exterminar al odiado facherio?. La respuesta es no, movido por ese talante que le caracteriza, Zapatero les perdona la vida y les permite exiliarse en Francia. Error fatal. Marianito se pondrá de acuerdo con Sarkozy y el ejército francés invadirá el Estado Español con el apoyo de el ejército italiano. ZP ¿qué has hecho?. En menos de una semana, los franco-italianos se plantan frente a Zaragoza, último obstáculo hasta Madrid. Allí, el Ejército Español parará el primer golpe. Aquí comenzará nuestra historia, a D+25 de la invasión.

La situación geoestratégica es la siguiente: frente al combinado franco-italiano y superados en una proporción 1,5 a 1 la Legión, la división mecanizada Brunete y unidades de infantería y caballería aguantan las embestidas francesas. Los F-18A+ han llegado a un cierto equilibrio con los Mirage 2000 franceses, pero no pueden hacer demasiado frente a los cazabombarderos, de ellos se ocupa la heterogénea defensa antiaérea española. En el capitulo infantería la cosa va bien, aguantan pese a estar escasos de misiles anticarro y antiaéreos. La cosa va muy bien en el apartado tanques. En el duelo Leclerc-Ariete/Leopard, éstos últimos llevan ventaja. La doctrina móvil francesa, ideada en St-Cyr se basa en los principios napoleónicos: movilidad y pegada, con el blindaje en último lugar. Además hay un problema de base con el motor francés, se trata de un motor hiperbárico. Y el Leclerc está lleno de electrónica. El diseño alemán se basa en sencillez mecánica y potencia. Los motores MTU disponen de 1.500 HP frente a los 1.200 HP del francés. El problema del motor francés se llama potencia y fiabilidad. El objetivo de todo diseñador de motores es conseguir la mayor relación de admisión posible. Hay varias formas de hacerlo. Los alemanes eligieron aumentar la cilindrada y aumentar el rendimiento del motor. El motor es más pesado, pero mecánicamente es fiable. Los franceses apostaron todo al peso, su motor hiperbárico es más ligero. Cuando tú diseñas un motor buscas que la proporción aire-combustible sea muy alta. Esto es, tratas de meter todo el aire posible en el cilindro para una misma cantidad de combustible. El método francés parte de un motor de unos 890 HP y mediante un sistema de hiperpresión absolutamente brutal, alteran la relación de compresión en el interior del cilindro. Ello permite que un motor de 890 HP dé la potencia de uno de 1200 HP con el peso del de 890 HP. Exige un trabajo en materiales muy exigente y es de gran complicación mecánica, pero cumple los requisitos. El Leclerc es más ligero que el español, pero todo tiene tiene un precio. En circunstancias de combate, a plena potencia, si al Leopard le fallase el motor una vez de cada diez, al Leclerc le fallaría dos o quizás tres, esto es, el doble de veces. El diseño es más complejo y cuando se fuerza al motor, éste va al limite. El Leclerc es más ligero y más maniobrable, pero eso también tiene relación con el blindaje. El Leopard está diseñado para dar y recibir, el Leclerc basa todo en la maniobrabilidad y la electrónica, golpear y huir o bien disparar a distancias seguras, la misma doctrina del Ariete, si bien éste es aún inferior. En un duelo uno a uno, de poder a poder, la mayoría de los duelos los ganarán los Leopard. El problema está en que el EdA no puede garantizar una impermeabilidad absoluta frente a l'Armée de l'Air y la Aeronautica Militare, sin contar con que Francia dispone de autonomía industrial, ésa es su gran baza en la guerra de desgaste que tendrá lugar si la operación “Grande Armée” no consigue romper el frente español. Pero no penséis que España está indefensa frente al invasor, en la retaguardia francesa la guerrilla ha comenzado a operar. Y aún no hemos hablado de la Armada. Ésta ha comenzado su particular guerra contra el francés. La primera orden que se dió al ver el cariz que tomaban los acontecimientos fue cerrar el Estrecho. Una Baleares procedió a situarse frente al mismo apoyada por dos Descubiertas reacondicionadas. Hay una guardia permanente de P-3 cubriendo la zona entre Málaga y el Estrecho. Simultáneamente se procedió a desplegar una base avanzada de submarinos en Sóller, junto con un destacamento de F-18A+ con toda la reserva de Harpoon disponibles y bombas frenadas. El petróleo que alimenta al ejército francés e italiano tiene que venir desde Oriente Medio o, en caso de emergencia de Argelia. En ambos casos, a través del Mediterráneo. Y aquí intervienen nuestros Galernas. El número ideal de submarinos para España es de ocho si son convencionales o de seis si son nucleares. Se espera que la serie S-80 estará disponible en la próxima década, pero ahora sólo hay cuatro Galernas con más de veinte años en sus cuadernas. Han sido convenientemente modernizados, pero muchas piezas, entre ellas los torpedos, vienen de Francia. Se ha lanzado un programa de emergencia por el MK 48 americano, pero llevará tiempo. Por ahora, las reservas bastan.
Mientras tanto en el Atlántico, el portaaeronaves Príncipe de Asturias tiene su particular guerra con nuestros queridos vecinos. Protegido por una o dos Santa María dando profundidad al despliegue ASW, con una o dos Álvaro de Bazán protegiéndola de todo mal AAW y con el Patiño ocupándose de reaprovisionarle, el PdA se dedica a amargarle la vida al francés. El Forbin y el Chevalier Paul, el equivalente a las AdB han recibido un tratamiento especial por parte de los Harrier de la Armada. El Harrier español está adaptado al ataque nocturno. El grupo operativo del PdA se mantiene fuera del alcance de los Super Etendard franceses equipados con Exocet. De vez en cuando, un Atlantique es borrado de la lista de aviones en activo. Cuando llega la noche, el PdA se acerca a menos de 200 millas de la costa francesa y lanza sus Harrier. Golpea y huye. Por el momento, los puertos del atlántico franceses están bloqueados y España dispone de barra libre para aprovisionarse de petróleo y suministros, el disponer de autonomía industrial no sirve de nada si no dispones de materias primas.
Por otra parte, los submarinos desplegados en Menorca y los F-18A+ desplegados en Mallorca amenazan al vital tráfico mediterráneo francés y en menor medida, italiano. La ruta al petroléo argelino no es apta para fistros ni pecadores, el español hace pupita. Súmese a eso que la Armada ha enviado corsarios a minar determinados pasos (Estrecho de Sicilia, Canal de Otranto) y sus saboteadores están a la caza del petrolero loco y se verá que las cosas no son tan sencillas para Ségolène. Y el espionaje del PSF trabaja para España. Éste es el cuadro general.
En el cuadro particular tenemos al submarino Siroco patrullando a 100 millas de la costa argelina. Hace una semana zarpó de Sóller. ¿Habrá suerte?

[juan de la cosa]

Me he olvidado de añadir que, de los cuatro Galernas disponibles, sólo dos están actualmente operativos, uno está en Cartagena en refit y un segundo está reaprovisionándose. De los dos operativos, hay uno patrullando frente a las Baleares, junto con los F-18A+ del destacamento de Mallorca y las diversas guarniciones, es lo único disponible en el caso de que el Charles de Gaulle y el Conte di Cavour apoyen un asalto anfibio a nuestras islas.
En el lado franco-italiano, la operación "Grande Armée" se ha visto detenida por el Ejército español y hay una cierta escasez de combustible. Se ha pedido un envío de emergencia desde Argelia, que es neutral y abastece a unos y a otros y se está preparando un convoy desde Marsella a Argel (Orán está demasiado cerca de España). Su escolta, muy fuerte, consiste en un destructor F70/ASW(Georges Leygues), otro F70/AA (Cassard), dos Maestrale y dos A69 (D'estienne d'Orves) con apoyo durante todo el trayecto de un Atlantique de la Aeronautique Navale. Si la Armada intentase algo en superficie, los Tornado antibuque italianos, basados en Cerdeña intervendrían. El convoy está compuesto por 25 barcos e incluye dos superpetroleros de 125.000 toneladas (como un Prestige, pero más grande). Como apoyo va el CdG con su grupo operativo a 100 millas. Permanecerá en el centro del Mediterráneo Occidental, cubriendo toda la operación. Si uno sólo de los superpetroleros llega a Marsella, habrá suficiente combustible para un segundo intento, los ataques en profundidad del PdA y los F-18A+ con Taurus han tenido cierto impacto en las reservas aliadas. Lo único que puede evitar que la operación tenga éxito es el Siroco y los F-18A+ de Mallorca, la Armada está ocupada en otra parte y la consigna en el Mediterráneo es ponerse a la defensiva. La ofensiva tiene lugar en el Atlántico, donde la marina francesa es más débil. Los submarinos lanzamisiles han sido trasladados a la Martinica por motivos de seguridad y únicamente hacen frente al grupo operativo del PdA el grupo antisubmarino de Brest y fuerzas ligeras, los Rubis han sido bloqueados en el Mediterráneo y los dos Forbin están fuera de combate. Más de veinte mercantes franco-italianos han sido capturados. Por otra parte, en el sector comunicaciones, los franceses han conseguido destruir el satélite de comunicaciones español mediante pulsos láser (láser Megajoule, creado originalmente para estudiar una explosión nuclear- si queréis, un subproducto de Mururoa), por lo que las comunicaciones españolas se basan en las antenas ELF y ULF de la Armada, no hay satélite ni imágenes por satélite (el satélite Helios es franco-italiano-español, y nuestra parte no es la mayoritaria, así que va a ser que no). La información sobre el convoy llega a través de conductos socialistass, y no es exacta, sólo sabemos que se prepara un convoy y que hay muchos barcos. Sí dispondremos de la fecha exacta de partida. Ahora pasaré a explicar los diversos enfoques al "problema".

[juan de la cosa]

Desde el punto de vista del escolta, hay dos enfoques posibles: rutas patrulladas y convoyes. La ruta patrullada es un muy viejo enfoque que siempre se ha demostrado viable en rutas cortas, para lo demás nunca ha funcionado. Consiste en que una determinada ruta es constantemente patrullada por buques y aviones y a través de la misma van circulando los mercantes, sin escolta directa. Se supone que en cuanto exista el menor contacto, los aviones de patrulla y un grupo de ataque aparecerán y acabarán o alejarán al intruso. Se intentó en la primera guerra mundial en la ruta Burdeos-Inglaterra sin demasiado éxito. Los teóricos de la OTAN lo propusieron para el puente trasatlántico, ignoro si se les tomó en serio. Los buques SURTASS iban por ahi. Ellos permitirían vigilar la ruta, permitiendo que diversos grupos de escolta o aviones ASW investigasen los contactos. Desde el punto de vista económico, este sistema es mejor, pues no hay pérdidas de tiempo para formar el convoy, cada buque viaja a su mejor velocidad, y no a la del navío más lento y al llegar a puerto de uno en uno, sucesivamente, las instalaciones del puerto no se colapsan como sucede con un convoy grande. Por todo ello es favorecido por un grupo de teóricos de la guerra naval, principalmente por motivos económicos. El segundo enfoque es el viejo convoy, que es un medio ofensivo. Si os dáis cuenta, se trata de hacer que tu enemigo vaya a ti, que lo estás esperando. Económicamente es peor, pero es un medio eficaz, como se demostró en la primera batalla del Atlántico (1492-1836) entre España y las diversas potencias europeas de la época (Inglaterra, Francia, Holanda). El recurso al convoy permitió a la Armada aprovisionar a la Monarquía de oro, plata y diversos recursos, así como mantener el vínculo trasatlántico. Excepto en Matanzas (1628, Piet Heyn), el sistema funcionó perfectamente y el vínculo jamás fue roto (se podría discutir sobre eso referido a la década que precedió a Trafalgar). Asimismo, durante la Primera y Segunda Guerras Mundiales, el convoy permitió vencer a la ofensiva submarina alemana. Fue la práctica inexistencia del mismo hasta fechas muy tardías la que permitió la derrota de Japón en el último conflicto mundial. Aunque Japón no hubiese sido derrotado en Midway y Guadalcanal, la sangría de los años 43-45 a su flota mercante fue absolutamente brutal. En 1944 Japón tenía escasez de materias primas, especialmente petróleo y se pasaba hambre, por eso la flota fue redesplegada de Truk a Borneo (Brunei). El petróleo de Borneo es el único del mundo que puede utilizarse sin refinado, por eso el Sultán de Brunei es de los hombres más ricos del mundo, si no el que más.
Digamos que el lema del convoy es lento pero seguro. Básicamente el convoy consiste en agrupar un cierto número de mercantes, desplegados en determinada formación (líneas y columnas) que navegan en zig-zag y van a la velocidad del navío más lento. En el exterior, formando uno o más perimetros, están los escoltas, que pueden ser submarinos, de superficie y aéreos. En los medios aéreos incluid también el dirigible, no penséis que su historia terminó con el Hindenburg. Ésta son las teorías sobre protección del tráfico mercante.

B.

[juan de la cosa]

Desde el punto de vista de estrategia naval, el submarino es un medio negativo de dominio del mar. Su presencia impide o dificulta el tráfico enemigo, pero el por si mismo es incapaz de alcanzar del dominio positivo. El dominio positivo te permite a voluntad realizar los despliegues navales que estimes oportunos: ataques a tierra, desembarcos, tráfico naval. El dominio positivo te permite dictar tu voluntad al enemigo. El dominio negativo sólo impide sus operaciones. El submarino es un medio económico de obtener un dominio negativo del mar. En el enfoque moderno de la guerra de desgaste, ésta es principalmente económica y allí, el uso adecuado del poder aéreo y submarino, con ocasionales aportaciones de la Flota, permite desgastar la flota mercante enemiga. En dicha guerra, tu prestas principalmente atención al volumen de tonelaje hundido. Si léeis libros sobre la guerra submarina durante la SGM, tanto Doenitz como el Mando de los Western Approaches calculan la derrota o victoria en tonelaje hundido. Una “ficha” de 10.000 toneladas vale más que otra de 5.000 y un petrolero es más valioso que un buque de carga a granel, ése es el criterio. En nuestro ejemplo, los dos superpetroleros son las “fichas” que hay que hundir, el resto es secundario. Nuestro objetivo no es destruir la flota mercante franco-italiana, ni hay tiempo ni es el objetivo, ni disponemos de medios para ello. 6-12 F-18A+ y uno o dos submarinos no permiten llegar a eso. Clausewitz, el teórico de la guerra moderna, dice que hay que adaptar la estrategia a los medios disponibles. No podemos acabar con la flota mercante francesa, podemos embotellarla en el Atlántico y disminuir el número de sus “fichas” (los petroleros) más valiosas. El Ejército necesita tiempo y si la Armada corta o disminuye el tráfico de petróleo la situación irá girando lentamente a nuestro favor. Es una guerra de desgaste. La prioridad son los petroleros. Hundir una unidad naval, excepto si es un submarino clase “Rubis”(Amethyste) o el CdG, es irrelevante. En la batalla que se está librando frente a Zaragoza, la clave es el Siroco, los F-18A+ y la información que pueda obtenerse, tanto por el espionaje como por los medios de reconocimiento (en este caso, los P-3B modernizados). El Siroco buscará los petroleros, ellos son la clave. Éstas son las estrategias de ambos bandos, después explicaré la táctica, es muy sencilla. Sigo.

B.

[juan de la cosa]

La obligación del capitán de nuestro Siroco es llegar a la ZLT (zona de lanzamiento de torpedos). No dispone de suficiente velocidad para perseguir a un convoy a 8-10 nudos como es nuestro caso. La velocidad máxima de nuestro Agosta modificado son 20 nudos durante una hora o 17,5 nudos durante un período mayor. Por motivos de duración de la bateria, su velocidad de ataque rondará los 8-9 nudos. Por ejemplo, si atacase al grupo del CdG y éste fuese a una velocidad de crucero de 21 nudos y nuestro submarino estuviese a un grado de divergencia con el rumbo del blanco de 38º, estaríamos en condiciones de atacar si navegásemos a 9 nudos. Si la divergencia fuese de 64º, serían 15 nudos. En nuestro caso podemos permitirnos una divergencia mayor. Lo ideal es estar a rumbo con el blanco, lo que nos permite meternos en medio del convoy: destrucción máxima asegurada, pero no es nuestro caso. Nos pondremos por la proa del mismo y trataremos de acercarnos lo máximo posible al blanco, indetectados si es posible. Comparados con los Agosta franceses, nuestros Galernas disfrutan de un 10% de potencia extra en las baterias, no todo lo español es malo. Disponemos de dos torpedos: el L5, preferentemente antisubmarino y el F17 guiado por cable. Éste último es un torpedo dual (antibuque-antisubmarino), con un alcance máximo de 10 millas y 250 kg de explosivo. Será el que usaremos. Tiene guía activa/pasiva. Nuestra ZLT forma un radio de 10 millas en torno al convoy, pero en realidad lanzaremos a una distancia menor, preferiblemente 5 millas, donde nuestro sensor pasivo DSUV22 discrimine claramente los blancos del tremendo ruido que 25 motores diésel de gran potencia hacen en el agua. Basándonos en los datos del Sintra DSUV22 introduciremos los datos en el computador de tiro y lanzaremos filoguiados. Cuando estemos cerca cortaremos el cable y el torpedo pasará a guía activa. La pasiva también es válida, pero con 25 blancos no sabemos a donde irá, puede atacar al superpetrolero o a los otros 23 buques. Si no nos descubren, podemos mantener el guiado por cable hasta el final. Un problema de la clase Galerna es que sólo dispone de cuatro tubos lanzatorpedos, lo cual significa que en realidad disponemos sólo de una oportunidad contra cuatro blancos, la recarga nos llevará entre media hora y una hora, quizás menos con una tripulación bien entrenada y si el enemigo no nos acosa. La nueva serie S-80 corrige eso con seis tubos. Pasando al capitulo de sensores, el DSUV22 nos da sonar pasivo en un ángulo de 270º en torno a la proa, la cobertura en los 360º corre a cargo del equipo de sonar remolcado SAES Solarsub que, si la memoria no me falla, es un equipo clip-on, esto es, la antena remolcada es “enganchada” al submarino por buceadores al salir de patrulla. No hay instalación interna con güinche y depósito de recogida. Disponemos de un sonar activo de media frecuencia, el Sintra DUUA 2A/2B, su alcance son 100 millas, cinco veces más que el sonar de los escoltas. Si utilizo el sonar activo, revelaré mi posición, debo recurrir a medios pasivos preferentemente. Si un sonar me “ilumina” el equipo Eledone me dará su posición y distancia, permitiendome tomar medidas evasivas o lanzar un torpedo en esa dirección. Es la antena sobre la proa del submarino. La caza comenzará tomando referencias con el Solarsub y triangulando. Después adoptaré rumbo de ataque y buscaré una divergencia mínima con el convoy. Usaré las referencias del Solarsub o del DSUV22 para discriminar el blanco y obtener las referencias para guiar los F17. Dispongo de señuelos de burbujas y de otros tipos, pero no dispongo de recubrimiento anecóico. Éste consiste en unas losetas de un material derivado del caucho que absorben las ondas del sonar. Si un sonar me ilumina, me habrán detectado. Éstos son los datos de partida del Siroco.

[juan de la cosa]

Aún no hemos hablado de las defensas del convoy. Por delante del convoy vuela un Atlantique lanzando lineas de sonoboyas LOFAR pasivas de baja frecuencia. Ellas analizarán el espectro de frecuencias para la hélice del Siroco y la emisión sonora del motor (50Hz). Al iniciar la patrulla lanzo una BT para obtener el perfil de la “capa” y a partir de él localizar las sonoboyas. Asumiremos que la capa está a 60 metros de profundidad. En distancias aproximadas de entre 2 y 5 millas entre ellas, lanzó una sonoboya formando líneas perpendiculares a la dirección del convoy. Después del patrullero, vienen las Maestrale. Disponen de VDS (sonar calable) modificado con capacidad anticampos de minas y capacidad clip-on de añadirsele un sonar calable pasivo. En este caso no lo llevan. Navegan a 10 millas del grueso con el sonar VDS activado, en línea de frente. Tras ellas, y encabezando el convoy, navega el Montcalm, un Georges Leygues de la primera serie, el cazasubmarinos especializado de la Royale. A bordo va el comandante del convoy, un contraalmirante. Por la banda de estribor navega el Cassard cubriendo el espectro AAW. Tras la perdida de los dos Horizon son los únicos escoltas antiaéreos disponibles. Son escoltas AAW muy limitados. Su lanzador es un Mk13, el mismo que el de las Santa Maria y dispone de sólo dos iluminadores para guía de los Standard SM-1. Cubriendo ambos flancos van las A-69, un escolta antisubmarino costero pero muy útil en el Mediterráneo. A bordo de los buques equipados con helicóptero hay uno armado con torpedos Mk46 listo para ser lanzado a +5 (en 5 minutos está en el aire) y con el segundo listo a +15. El Panther del Cassard va desarmado pues tiene otra función. Hay que tener en cuenta que tanto helicópteros como buques sólo disponen de torpedos ligeros, concretamente los L5 (Cassard y las A69) tienen 5 millas de alcance efectivo, mk46 en los italianos y en los helicópteros (6 millas) y MU-90 en el Montcalm (6 millas). En el caso de las A69, una dispone de mortero antisubmarino y los helicópteros pueden desplegar cargas de profundidad, ambos sistemas muy útiles en aguas costeras. El esquema de defensa antisubmarina se compone de porteros y liberos. Si el Atlantique o las Maestrale detectan a nuestro submarino, los líberos, las Maestrale, procederán a investigar y si procede, atacar el blanco, desentendiéndose del convoy. Los porteros de nuestro equipo de fútbol, la Montcalm y las A69 harán virar al convoy alejándose del contacto y proseguirán la escolta, las Maestrale, en este caso la Grecale y el Libeccio se reincorporarán una vez hayan alejado o hundido al intruso. Si el Siroco pasa las dos primeras barreras estará en ZLT y podrá decidir si ataca ya o espera. La decisión dependerá de la situación táctica y el rumbo del convoy, ya sea convergente o divergente con el rumbo del Siroco. Si le detectan a bordo del Montcalm, éste procederá a lanzar un torpedo inmediatamente en dirección al intruso para abortar el ataque. Si el Siroco consigue (el sueño de todo submarinista) introducirse en el interior del convoy, las dos A69 tienen barra libre para entrar allí dentro y hacer lo imposible para abortar el ataque. Por supuesto, los helicópteros serán lanzados inmediatamente y colaborarán en la caza. Excepto en los dos últimos casos, la consigna de la escolta es recurrir a los helicópteros, teniendo en cuenta que el Siroco te puede hundir a diez millas y tú sólo eres peligroso para él a cinco millas, un ataque directo con torpedos es un recurso desesperado y muy peligroso. Un submarino acorralado procederá a atacar a sus agresores. Y tiene todas las de ganar. En el aspecto aéreo, la cobertura del convoy corre a cargo de los Hawkeye del CdG, que son los que nos darán horizonte radar. Cubren perfectamente el Mediterráneo Occidental. Si un P-3 o los F-18A+ asoman en el horizonte, procederá a dar la alerta y guiar a los Rafale en +5 del CdG, dando asimismo aviso al jefe de la escolta, que procederá, si es el caso, a formar un dispositivo antiaéreo. En el dispositivo antiaéreo, el jefe es el Cassard, él nos da la defensa en profundidad. Rápidamente las A69 formarán junto con el Montcalm en la banda de estribor. La primera capa son los Standard (25 millas), luego vienen los Crotale (7 millas) del Montcalm, los Mistral de las A69(2 millas) y finalmente, se formará una barrera fija de fuego antiaéreo a cargo de las piezas de 100mm, complementadas por piezas ligeras. El problema está en que el Cassard sólo puede guiar a dos misiles simultáneamente y que los demás sistemas de misiles son de autodefensa, esto es, de muy corto alcance. La clave es abatir al P-3 antes de que descubra al convoy, si no la defensa es muy difícil. Y eso corresponde a los Rafale.
Si se diese el caso de que la Armada enviase unidades de superficie y el convoy no se viese inmediatamente respaldado por el grupo del CdG, se recurriría a la pinza. Las dos A69 procederían hacia el flanco izquierdo del enemigo, precedidos por el Panther del Cassard, que les daría guíado y en el lado derecho de los españoles aparecerían la Grecale y el Libeccio con misiles Otomat y apoyo de helicóptero. Los españoles no disponen de medios ligeros y sus unidades de superficie están en otra parte, así que el peligro por ese lado es pequeño. El Otomat tiene más alcance que nuestros Harpoon y el Exocet es equivalente. Como curiosidad, es la maniobra que intentaron los argentinos en las Malvinas y en la cual participaba el Belgrano. Un clásico. Cuando se entre en la zona de bajos fondos, el Atlantique procederá a retirarse a popa del convoy por si acaso y las dos Maestrale pondrán en funcionamiento el módulo de alta frecuencia de sus VDS. El objetivo es buscar minas. Por cierto, el Siroco sólo lleva a bordo 9 torpedos. Continúo.

B.

[juan de la cosa]

El día D+26 de la invasión nos llegó el avisode que un grupo de buques con escolta había zarpado de Marsella el día anterior. Rápidamente se envió un P-3 que volvió con la información de que el CdG y su grupo habían tomado posiciones en el centro de la cuenca Occidental. El reconocimiento radar era así imposible, así que se preparó una operación combinada: los F-18A+ de Mallorca, 9 en total, harían una finta hacia el CdG y un P-3 se deslizaría a través de la costa argelina. Dicho y hecho. Mientras el Hawkeye daba la alarma y el CdG procedía a lanzar el par de Rafales que tenía preparados, nuestro buen P-3B, bien pegado a la costa argelina y en vuelo táctico, da una suave curva antes de virar hacia Cerdeña. El convoy, ya vaya a Argelia, ya se dirija al Mediterráneo Oriental contorneará las Baleares y se pegará a Cerdeña. Al llegar a Mers-el-Kebir (Mazalquivir) nuestro amigo iniciará un giro al Norte. Mientras, los F-18A+ juegan al gato y al ratón con cuatro Rafales. Entran y salen de su cobertura radar una y otra vez, los franceses están desconcertados. A medio camino entre Cerdeña y Sicilia, nuestro P-3 sube y lanza un barrido con su radar APS-134. Hay un leve indicio a 30 millas de Cerdeña. Hay que investigar. Abajo. 30 millas más allá volvemos a subir y lanzamos otro pulso. Esta vez obtenemos una imagen casi completa del convoy. Marcamos su posición y procedemos a transmitir. Las tripulaciones de los Tu-142 Bear F rusos tienen un chiste, ya viejo en la era soviética: Hemos hallado a la flota enemiga. Adiós. El Cassard captó la primera emisión y dió la alerta. Mientras el CdG procede a lanzar otro par de Rafales, el Cassard ilumina a nuestro P-3 y procede a lanzar un Standard. Está al límite de alcance, pero hay que procurar que el espía no tenga la imagen completa. Los Rafales van a tardar unos 20-25 minutos en ser preparados y lanzados. Nuestro P-3 tiene que preocuparse ahora por su salud. Mientras se procede a analizar la imagen radar a bordo, toma rumbo sur. Para cuando se aproxime a Argel, los primeros ecos del radar doppler de los Rafales empezarán a alcanzarle. A diferencia de los Nimrod ingleses, no dispone de Sidewinder de autodefensa ni perrito que le ladre. ¿Qué hacer?. Las fuerzas armadas españolas disponen desde el siglo XVIII de un arma secreta. Es el arma secreta que permitió mantener el imperio, rechazar al francés a principios del XIX y que permitió que Francisco Franco Bahamonde, sin base económica sólida y con unas bases materiales muy escasas, ganara la última Cruzada que convocó la Santa Madre Iglesia. Es una frase contenida en las Reales Ordenanzas de Carlos III. Dice así: la falta de material se suple con celo. Búscate la vida. Nuestro P-3 procede a realizar el “Beam”, la maniobra estándar frente a un radar Doppler. Adoptando un rumbo de 90º frente a los Rafale, nuestro héroe procede a adoptar rumbo al Estrecho de Sicilia. Acercándose y alejándose alternativamente provocará que en la pantalla del radar del francés aparezcan dos ecos simétricos, uno falso y otro verdadero. El resto lo hará el escaso alcance (relativo) del Rafale y la enorme capacidad de vuelo del P-3. Llegaremos tarde a la merienda, pero llegaremos. Por si acaso hemos bajado a ras de olas para que el clutter marino nos ayude. Se puede ir a la guerra sin un equipo ECM. La falta de material se suple con celo. En el Cuartel General de la Armada, que se ha trasladado (impacto de Apache en el viejo edificio), proceden a analizar la información que les ha transmitido el P-3. El convoy tardará un día-día y medio más en llegar a Argelia. Hay un buque con Standard, sólo puede ser un Cassard o quizás un italiano. Cuando el P-3B aterrice se procederá a analizar otra vez la imagen del radar. Al EdA se le pasará un aviso, hay que hacer trabajo de equipo. En Zaragoza, el Ejército pregunta qué hay de lo mío. Paciencia.

[juan de la cosa]

El P-3B llegó a primera hora de la tarde con el primer análisis de la imagen del radar. Un escolta antiaéreo francés clase Cassard de acuerdo con lo que dice el ESM. Dos buques de escolta por la proa a diez millas del grueso. Quizás dos o tres escoltas más, la imagen no está clara. Entre veinte y cuarenta buques, más o menos, quizás treinta. El convoy puede ir a Argelia o bien deslizarse por el estrecho de Sicilia. Por razones del rumbo adoptado (no se han escudado tras Córcega o Cerdeña y de allí pasar por el Estrecho de Messina, que es más seguro) el Estado Mayor llega a la conclusión de que se dirigen a Argelia. Orán está descartado por razones de seguridad, los F-1M les harían la vida imposible y un sólo escolta AAW no es suficiente para adentrarse en esa zona, quedan Annaba o Argel. Por otra parte el hecho de que el grupo del CdG les da apoyo indica que el convoy es importante. Hay dos ecos especialmente grandes, podría tratarse de grandes gaseros o de petroleros de gran tonelaje. Dada la información sobre las reservas de combustible de los ejércitos invasores y los ataques a sus depósitos, probablemente se tratará de petroleros. Serán el blanco prioritario. El Ejército necesita tiempo para parar el golpe y crear un frente estabilizado. Afortunadamente, el Siroco está cerca y ya ha hecho su trabajo. Si son petroleros, Annaba no es su lugar, apostaremos por Argel (NOTA: no sería el lugar adecuado para cargar/descargar petróleo, pero para nuestra historia sirve, recordar que no es más que un ejemplo). Hay que hablar con el EdA en su sede subterránea en Torrejón (los Apache no llegan hasta allí) y pedir apoyo. Un ataque por parte del Siroco, combinado con ataques aéreos podría hacer el trabajo. El EdA asignará, además de los siete F-18A+ disponibles (los Rafale también saben usar misiles, uno fue derribado y el otro está siendo reparado temporalmente, por parte francesa, un Rafale se “comió” un AMRAAM y otro tuvo que eyectarse a la vista de la flota, se puede decir que hubo empate), seis F-1M de sus magras reservas. En Torrejón se discute cuál es el mejor procedimiento. Si sólo hay un escolta antiaéreo, los demás, ya sean dos, cuatro o seis tendrán misiles de autodefensa de corto alcance, el peligro es el dúo Hawkeye/Rafale. El hecho de que España no disponga de AWACS dificulta mucho tanto la defensa como el ataque. Dado que se trata de un blanco importante, se les van a asignar Harpoon. Cuatro F-18A+ volarán como “Sweepers”, pero sólo llevarán un AMRAAM cada uno, el resto serán sidewinder y los viejos AIM-7M, el frente aragonés tiene prioridad en cuanto a material. Un P-3B les dará guiado, coordinará los ataques y, si es posible, evaluará los daños. Un F-18A+ llevará dos Harpoon, los otro dos cargarán seis Maverick y tendrán la misión de “abrir” un hueco en el cascarón AAW del convoy. En ambos casos, los misiles serán usados contra la escolta, los Harpoon irán a por el guardián antiaéreo y los Maverick lo rematarán o bien se ocuparán de los escoltas que se interpongan en el camino de los F-1M, que serán los encargados de atacar con bombas frenadas de 250kg a los cargueros. El objetivo es que los F-1M tengan el mínimo de problemas al atacar. Dos cisternas KC-130 H les darán apoyo y un Mystère tratará de crearles un “pasillo” frente a los Hawkeye. El Santiago es demasiado valioso para este trabajo. A medianoche, a 100 millas de la costa argelina, el Siroco asciende en espiral desde su cota de patrulla. Al llegar a cota periscópica sacará el mástil ESM y buscará la posible presencia de radares. Nada, sólo tráfico civil y un lejano eco del radar de Argel. A continuación guarda el ESM y saca el periscopio. La visión infrarrojos no revela nada. Es el momento de recargar las baterías y sacar la antena de radio. Se emite cifrado y comprimido el parte de posición, los “avistamientos”, la situación del armamento y combustible y el parte meteorológico local. Rápidamente llega un mensaje desde la antena ELF de las cercanías de Madrid: convoy lento, treinta buques. Dos petroleros grandes son el objetivo. Rumbos posibles Annaba y Argel, la última es la opción más probable. Rumbo de interceptación. La antena baja a su posición dentro de la vela y cuando dentro de media hora se haya cumplido el ciclo de recarga, volveremos a la segura profundidad. Viajaremos a 9 nudos hacia la posible zona del blanco. Una vez llegados a la zona iremos triangulando con el SolarSub, la antena remolcada, hasta que tengamos la posición y velocidad del convoy. Si Madrid se ha equivocado y adoptan otro rumbo, habremos perdido la virada. Dado que ya cumplimos nuestra primera misión frente a Argel y disponemos de sitio a bordo, recargaremos los cuatro tubos con F17, hay tiempo. Nos quedará otro F17 y cuatro L5, que usaremos como último recurso, son preferentemente antisubmarinos. Aprovecharemos el tiempo haciendo descansar a la tripulación y ordenando la cámara de lanzamiento de torpedos. Bon voyage

B.

[juan de la cosa]

El Siroco lleva navegando toda la noche hacia la zona de contacto probable. En cuanto el Solarsub ha indicado una gran zona de ruido no ambiental, hemos procedido a triangular. La base del cálculo de velocidades y rumbos en los submarinos se basa en la trigonometría. Una vez el Siroco ha obtenido el primer contacto supuesto, ha “tomado nota” del ángulo que le indica el sonar remolcado y ha procedido a realizar un rumbo de entre 45º y 90º al contacto. A unos cinco nudos, tardará unas cuatro horas en recorrer veinte millas. Una vez recorridas las veinte millas (pueden ser diez , treinta o la distancia que estime el comandante, contra mayor es la distancia más precisa es la localización, pero puede tardarse más tiempo en arrumbar al blanco) procederá a tomar otra medición con la antena remolcada, obteniendo un nuevo ángulo. Después, teniendo en cuenta que un triángulo tiene 180º y que, conocido un lado (las veinte millas) y los dos ángulos tenemos el triángulo que forman nuestras dos posiciones sucesivas y el blanco, con una distancia aproximada al mismo. Repitiendo el proceso dos o tres veces más, tendremos el rumbo del objetivo y un cálculo aproximado de su velocidad. Tened en cuenta que la posición del objetivo es aproximada, pues en las cuatro horas que hemos tardado en obtener la segunda marcación, éste se ha movido. El Siroco hará la operación dos veces y se aproximará al blanco. Entre acercarse desde la costa o acercarse desde el mar, ha elegido la segunda. Todos los submarinistas, excepto suecos y noruegos, preferirán siempre tener espacio táctico para moverse. Sólo con un conocimiento del fondo excepcional, timones de profundidad en X y una sonda de alta frecuencia puedes permitirte atacar desde el fondo en condiciones normales, como algo habitual. Lo normal es elegir el mayor fondo posible. La Armada dispone de la sonda de las costas de la mayor parte del Mediterráneo, si no todas, pero por mor de la seguridad, nuestro capitán elegirá acercarse “desde el mar”. Ahora está a unas cincuenta millas del blanco y ha comenzado ha distinguir entre los diversos contactos. El primer contacto es una Maestrale. Para saber la velocidad de un contacto con exactitud hay que conocer cuántas palas tiene su hélice. El sonar nos dirá el numero de vueltas que da su hélice y conociendo el número de palas y un par de datos más, tendremos la velocidad exacta a la que se desplaza el blanco. Es por eso que siempre se trata de ocultar la hélice, especialmente en submarinos. Es muy típica la foto de astillero en la que la hélice está cubierta con una funda, en los barcos no se suele ser tan discreto. Cuando un barco o un submarino hace sus pruebas de mar, siempre hay algún submarino o buque espía analizando su firma acústica (que es la que nos ha indicado que es una Maestrale) y diversas características del mismo. Todo el mundo, enemigos y aliados, lo hace. Por el momento dejamos al Siroco analizando el esquema del convoy a cincuenta millas por su proa, con un ángulo de divergencia de 20º con respecto al rumbo de éste.

[juan de la cosa]

Poco antes del amanecer, en las pistas de Son San Joan comienza la operación “Barceló”. El nombre de la misma viene a petición de la Armada, si llega a ser del Ejército, sería “Guzmán el Bueno””Witiza” o algo parecido. El EdA es partidario de nombres de origen anglosajón o modernos. Cosas de cada casa. Primero salió el P-3 a las dos de la madrugada a buscar el convoy, tras él salió el Falcon de guerra electrónica. Los F-1M salen después y los últimos, por mor del combustible, son los F-18A+. Los KC-130H están esperando a situarse. Una vez se acercan al horizonte radar del Hawkeye francés, el Falcon empieza su trabajo interfiriendo al radar del AWACS y “creando” un pasillo de seguridad para los miembros del equipo. Orbitando al límite de las aguas territoriales argelinas, el P-3 empieza a realizar su trabajo, lanzando pulsos radar al convoy y analizando el espectro ESM. Su equipo COMINT está preparado para trabajar. Los Sweepers se colocan inmediatamente detrás del pasillo, entre el CdG y el convoy. Dando un rodeo, los F-1M, que no disponen de capacidad de repostaje en vuelo se preparan para atacar por la popa del convoy. Los F-18A+ cargados con Harpoon AGM-84D y AGM-65D Maverick van a atacar por la banda de estribor, frontales a los escoltas. Hay un problema con los Maverick. Son infrarrojos, pero no de la versión F, antibuque, que es de la que disponen los Harrier de la Armada. Se espera que funcionen, pero evidentemente no es lo mismo. Al detectar los pulsos del P-3, el Cassard de la alarma y procede a encender el radar de exploración. Algo está pasando. Una vez la imagen del radar es clara, el P-3 apaga el equipo y, tras un breve análisis, procede a emitir sus órdenes. Para mayor seguridad, se lanzarán los Harpoon en el límite de las 50 millas, casi a bocajarro. Siguiendo al misil, vendrán sus compañeros con los Maverick. Su objetivo primario es el Cassard y el secundario cualquier otro escolta. Los F-1M vuelan a ras, listos para iniciar su viraje hacia la aleta de babor del convoy. Cuando llega el momento, el P-3 vuelve a subir y lanza otro pulso. Después da orden de proceder. No hay tiempo que perder, el Hawkeye y el Cassard han alertado al CdG y éste está preparandose a lanzar dos Rafales, seguidos de otros dos. El primer F-18 se eleva a 100 metros de altura, lanza un pulso y procede a bajar. Una vez introducidas las coordenadas del blanco, que es el más cercano, procede a lanzar. Sus dos compañeros siguen derechos tras el rastro de los dos Harpoon, en el Cassard se da la orden “branlevas de combat”. Todos a sus puestos. Un misil Standard es cargado en el lanzador, pero aún no se “ve” nada. A quince millas, el radar de exploración capta los ecos claramente y el sistema de combate da la orden de comenzar la secuencia de lanzamiento. Se lanzan dos Standard. Fallan. Se vuelven a lanzar. A cinco millas un Harpoon es borrado del cielo, el otro sigue. A 500 metros, el misil comienza la maniobra “Pop-up” subiendo bruscamente e iniciando un picado hacia la sala de máquinas, pero un Mistral lo para a doscientos metros. La explosión de la cabeza de combate hará que las cubiertas y las valiosísimas antenas de radar reciban una lluvia de metralla. El DRBJ11B es puesto fuera de combate, así como uno de los SPG-51C de guía de Standard. Repentinamente, el Cassard se queda sin el radar de exploración principal y sin la mitad de su capacidad de guiado. Vienen ahora los de los Maverick. En la confusión del ataque, nadie presta atención a los F-1M que están a punto de aparecer. Los dos primeros Rafales ya están en el aire esperando vector, no hay tiempo que perder. El primer F-18A+ procede a lanzar su carga completa contra el Cassard, el otro dedica su atención al Montcalm. El Cassard perdió demasiado tiempo con los Harpoon y no podrá parar la lluvia de Maverick que se le echa encima. Pese a un efimero éxito de sus Mistral, recibirá cinco impactos, dos en la sala de máquinas, dos en la superestructuras y otro en el pañol de Standard. Una bola de fuego marcará el fin del escolta, reducido a un amasijo de hierros en llamas. A bordo del Montcalm, separado cinco millas del Cassard, se ve al F-18A+ que viene a por él. Activan los Crotale. El F-18A+ lanza dos Maverick antes de convertirse él en una bola de fuego por causa de un Mistral de uno de los mercantes. El Crotale en un sistema muy eficiente y parará el ataque, salvando así al Montcalm. Los dos primeros F-18A+ se alejan como alma que lleva el diablo, rumbo a los cisternas. Los Sweepers salen del pasillo y activan sus radares, son cuatro contra dos, Mica contra AIM-7M. Los F-1M aparecen ahora por la popa del convoy, a cien metros de altura. La A69 de babor empieza a disparar fuego de barrera, la de estribor está tapada por los mercantes. Los F-1M distinguen las imponentes moles del blanco principal y proceden a dividirse en dos grupos de tres, uno por cada blanco. El ataque naval es practicado por el EdA, pero no es su especialidad, los cinco primeros aviones atacarán por las bandas y la mayor parte de las bombas caerán fuera o causarán daños superficiales. El sexto es un novato y recurrirá a trucos de novato. En vez de atacar de costado como sus compañeros, procederá a alejarse, tomar altura y atacar por la proa al petrolero. De cuatro bombas, las cuatro alcanzarán su objetivo, el puente de mando y la sala de máquinas. Cuando se ataca un barco, el blanco principal deben ser las máquinas, un buque inmovilizado es un buque muerto, nada salvará a nuestro amigo, con fuego a bordo, la mayor parte de la tripulación muerta o gravemente herida, la sala de máquinas en llamas y con una vía de agua. Los seis F-1M proceden a culebrear tirando chaff y bengalas. Uno será alcanzado por un Mistral cerca de la cola, pero podrá recuperar en Son San Joan. El P-3 lanza otro barrido y procede a retirarse. El análisis ELINT/SIGINT es interesante. Probablemente han sido alcanzados los dos superpetroleros y uno o dos escoltas se han hundido (los pilotos siempre exageran). En realidad, sólo el Cassard se está hundiendo, el superpetrolero “A” está sin propulsión y con fuego a bordo y el “B” sólo tiene daños superficiales. El combate entre los Rafale y los sweepers termina en empate sin vencedores ni vencidos. El operativo Barceló ha terminado con éxito y muy pocas bajas. El Falcon protege la retirada de los escoltas y cierra la marcha, el P-3 busca el ras del mar y se pega a la costa argelina. El jefe de la escolta da orden a una A69 de auxiliar al petrolero “A” y a los supervivientes del Cassard y ordena a la Grecale cubrir la posición del antiaéreo. Están a cien millas de Argel y en doce horas estarán enfilando la bocana. Si consiguen salvar a “A” y que “B” vuelva a Francia intacto, el sacrificio del F-70/AA no habrá sido en vano. Ignora que a cuarenta millas por la proa, el Siroco procede a la maniobra de aproximación.

B.