FUENTE: LA RAZON
http://www.larazon.es/noticia/3768-maur ... ooperantes
Parece que la cosa progresa.El inicio de un diálogo de contenido, en principio, «teológico», entre las autoridades de Mauritania y los presos islamistas, unos 70, que se encuentran en la cárcel de Nuakchot (la capital), es interpretado por medios de aquel país como una consecuencia de las negociaciones que diversos interlocutores mantienen con Al Qaida para el Magreb Islámico (AQMI). Este grupo mantiene secuestrados a seis occidentales, entre ellos tres españoles. LA RAZÓN, nada más producirse la captura de los cooperantes catalanes, informó de que, por experiencias anteriores, las exigencias de los integristas consistirían en el pago de importantes cantidades de dinero y la excarcelación de reclusos de la banda que cumplen condena en prisiones de países de la zona.
En el caso del ciudadano francés Pierre Camatte, AQMI ha dado un plazo de 20 días, que concluyen a final de este mes, para que las autoridades de Mali dejen en libertad a cuatro presos islamistas. En lo que respecta a los tres españoles y los dos italianos, las exigencias no se han hecho públicas (probablemente por la forma en la que se están llevando a cabo las negociaciones) pero se da como seguro que habrán pedido presos y dinero.
Recientemente, se ha celebrado en Nuakchot una conferencia, organizada por el Ministerio de Orientación Islámica y auspiciada por el presidente de la República, Mohamed Ould Abdel Aziz, en la que se ha abordado el asunto de la interpretación extrema del Islam que hacen los terroristas con el fin de justificar sus acciones criminales. Entre las conclusiones, además de reafirmar la «tolerancia del Islam y el rechazo del terrorismo», figuraba la de abrir un dialogo con los mantienen posturas radicales y, en concreto, los que permanecen presos.
El pasado lunes se celebró una primera reunión en la cárcel de la capital a la que asistieron varios ulemas (doctores de la ley mahometana) y en la que comparecieron medio centenar de presos, entre ellos destacados cabecillas. Periodistas de diversos medios pudieron seguir la sesión.
El encuentro estuvo protagonizado por un recluso, Khadim Ould Semane, detenido en abril de 2008, que se presentó con una camiseta en la que se podía ver una granada, un fusil Kalashnikov y la inscripción en árabe de Al Qaida. Este individuo, que representa a los «duros» del colectivo (unos 20) mantuvo posturas irreductibles, propias del fanatismo religioso y contrarias al diálogo. El otro grupo, que agrupa a unos 50, 25 de los cuales ya han firmado un documento, está dirigido por Abdallahi Ould Sidina. Dada la extrema radicalidad de los cabecillas de AQMI, cabe pensar que sus exigencias de liberación se centrarán en los reclusos que encabeza Ould Semane.
El hecho de que los terroristas hayan hecho públicas sus peticiones en el caso del rehén francés y que las mantengan en secreto para los tres españoles y los dos italianos, podría hacer pensar que, en este caso, las negociaciones marchan por buen camino. Un medio periodístico mauritano hablaba de que AQMI ha pedido, entre otras cosas, millón y medio de dólares por la liberación de los españoles.
En manos de tres «Katibas» diferentes
Los seis ciudadanos occidentales secuestrados por Al Qaida para el Magreb Islámico (AQMI) están retenidos por tres «katibas» (unidades de combate) diferentes. El francés puede estar en manos de una célula a las órdenes de Abdelmahid Abu Zehid. El contenido del comunicado en el que se exigía la liberación de cuatro presos encarcelados en Mali y el recuerdo del asesinato, en junio del año pasado, del súbdito inglés Edwin Dyer (al no aceptar Londres sus exigencias) parece acreditar esta hipótesis. En el caso del matrimonio italiano, cuya fotografía ya ha sido publicada en una web islámica, estarían retenidos por otro grupo. Y los españoles, de los que no ha aparecido ninguna imagen (aunque los terroristas han hecho llegar a los interlocutores del Gobierno pruebas de que se encuentran bien, incluso Albert Vilalta, que resultó herido de bala en el momento del secuestro) estarían en manos de una célula de las que controla Moktar Ben Moktar. Este individuo es un auténtico «superviviente», ya que ha pertenecido a todos los grupos del terrorismo islamista argelino sin haber sido detenido en ninguna ocasión, lo que hizo pensar a algunos que podía ser un «infiltrado», extremo que nunca se confirmó. Su larga experiencia dentro de este tipo de bandas le convertiría en un personaje más accesible y con el que se podría negociar mejor, aunque no deja de ser una conjetura.